Es fácil pensar que “ahorrar” es invertir. Aunque ambos conceptos suelen ir de la mano, también funcionan de forma muy distinta.
Invertir” es algo más que ahorrar para los días de vacas flacas.
Desde un punto de vista práctico, ahorrar consiste en guardar dinero hoy para utilizarlo en el futuro. Es lo que los economistas denominan “consumo no realizado”. En otras palabras, en lugar de gastar todo tu dinero, depositas una parte en una cuenta de ahorro para otro momento.
El ahorro es un buen punto de partida para invertir, ya que proporciona los fondos de inversión necesarios para adquirir distintos activos. Sin embargo, invertir va un paso más allá y le ayuda a alcanzar sus objetivos personales con tres ventajas significativas.
La posibilidad de obtener beneficios a largo plazo
Mientras que ahorrar significa reservar parte del dinero de hoy para mañana, invertir significa poner el dinero a trabajar para obtener potencialmente un mayor rendimiento a largo plazo. Las distintas clases de activos de inversión -efectivo, renta fija, inmuebles y acciones- suelen generar distintos niveles de rentabilidad (que es relativa al riesgo de la inversión).
Los activos “de crecimiento”, como las acciones y los inmuebles, han obtenido históricamente los mejores rendimientos globales de todas las clases de activos, pero también han registrado mayores picos y caídas. Como inversor, tiene la posibilidad de obtener un crecimiento del capital a largo plazo, así como una renta continua (como los dividendos de las acciones o el alquiler de un inmueble).
Los activos “defensivos”, como la renta fija y el efectivo, pueden no haber generado el mismo nivel de rentabilidad a lo largo del tiempo que los activos de crecimiento, pero esta rentabilidad ha sido menos variable, con menores picos y caídas.
Vencer a la inflación
La inflación es el aumento continuo del costo de la vida a lo largo del tiempo, y puede afectar a nuestro bienestar financiero.
Una forma de ayudar a superar la inflación y generar rendimientos “reales” positivos a largo plazo- es invertir en activos que no sólo sean capaces de generar mayores rendimientos por rentas, sino que también ofrezcan potencial de crecimiento del capital.
Obtener ingresos adicionales
Es posible obtener ingresos adicionales invirtiendo en activos de calidad.
El rendimiento de sus inversiones puede utilizarse como fuente de ingresos regulares adicionales para la vida diaria. O puede optar por reinvertir el dinero para aumentar aún más tu patrimonio.
En resumen, el ahorro es importante. Dependiendo de su apetito por el riesgo, las ventajas de invertir pueden significar tener algo más que dinero para “días de lluvia”.
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